El calendario tenía una fecha resaltada especialmente: 5 de marzo. Bautismos, casamientos, viajes, trabajo o lo que fuera… nada podría coincidir con ese día. Es que ese sábado de 2016 la vida de cientos de muchachos que hoy están entre los 35 y los 36 años viajaría hacia finales de la década del ’90. Rugby y amigos. Dos palabras, tan simples como inmensas en su significado, convergieron el 5 de marzo en la cancha de Universitario en el Primer Encuentro de la Clase 80.
Fue como vivir desde adentro la escena de Volver al Futuro en la que Marty MCFly viaja al pasado. Pero no a un pasado tan lejano. Quizás unos 15 años, cuando compartir a una cancha de rugby con amigos era encontrarle un sentido a la vida.
Varios pelados, algunos con bastantes kilos de más, casi todos con un estado físico no recomendable para este deporte hoy, los “pibes” de la ’80 de Tala, La Tablada, Universitario, Palermo Bajo, Jockey, Athletic y Córdoba Rugby volvieron a cruzarse en un rectángulo vestidos de jugadores de rugby.
No se trató de un mero encuentro de Classics, donde convergen exjugadores de distintas camadas. Fue una reunión de amigos posta, de los que han compartido estudio, salidas, bromas, risas y llantos adolescentes. Con la diferencia que esta vez un gran porcentaje estuvo acompañado en la cancha por su mujer e hijos. Es que si había un momento para que las esposas entendieran lo que fue jugar al rugby con amigos, ese era el sábado 5 de marzo.
Hubo quienes interrumpieron vacaciones, como Pablo Castellano de Tala, que se volvió antes de Brasil y el viernes a la noche aterrizó en Porto Alegre. Y de ahí a Córdoba en auto. Más de 1400 kilómetros manejando toda la madrugada para llegar a tiempo al evento. O Paulo Cechetto, del Bajo, que con ayuda de sus compañeros de la división, voló desde Madrid exclusivamente para el reencuentro. O Juan Becher, que aterrizó de México para jugar otra vez en La Tablada. Y así…
Varios, ya instalados en otra provincia (muchos que se volvieron después de estudiar en Córdoba), viajaron con la familia o sin ella sólo para poder estar este encuentro, que tuvo una organización impecable a cargo de Gaby Giménez, de la “U”. “Fue un sueño que tenía desde hace mucho”, dijo con un hilo de voz por culpa de la emoción. Lo hizo posible gracias al inestimable apoyo de un par de delegados de cada club. Y así, con la excusa de jugar un rato al rugby, armaron un evento que (como en las viejas épocas) volvió a poner la amistad por encima de todo.
Delegados y organizadores: Maxi Zarzuela y Martín Cipolatti (Athletic), Seba Montiel y Seba Toledo (Tala), Negro Ferrini (Palermo Bajo), Iván Andrés y Jere Carot (Jockey CC), Alejandro Re, Nacho Marraro y Juanchi Salinas (Córdoba Rugby), Magoo Canale y Ramiro Martínez (La Tablada), Gaby Giménez y Pablo Garriga (Universitario).
Sponsors: Bodega Santa Julia, Grido, Sushi Flower, Dixtron, Tregar y Cerveza Imperial (main sponsor).