Los Dogos finalizaron el Campeonato Argentino cuartos, una posición extraña si se mira la jerarquía del plantel cordobés y los objetivos que marcan su historia. Sin embargo, el tener un nuevo cuerpo técnico y varios jugadores que se sumaron al grupo hacen que el análisis no abarque solamente lo numérico.
Lautaro Casado, uno de los referentes del conjunto dirigido por Germán Schröder, se refirió a la producción de los cordobeses. «Es un balance 50/50. No se consiguió el ritmo de juego que pretendíamos, pero sí armar un equipo. Estamos conformes en cuanto al grupo que se armó con un nuevo cuerpo técnico, pero en cuanto al juego el balance es negativo. Sabemos que este equipo puede más y no lo conseguimos», expresó.
Estos son algunos de los ítem que desarrolló el tercera línea de Urú Curé:
- El juego de los Dogos
Cuando nos largábamos a jugar el nivel era bueno y cuando nos propusimos jugar con actitud una final como fue contra Mendoza salió la mejor versión. Nos faltó afianzar un poco más la defensa y eso que todos los jugadores tienen buen nivel de tackle. Quizás esta altura del año el jugador no puede lucirse en sus virtudes.
- La preparación
Decir que nos faltó tiempo y por eso terminamos cuartos es es ponerse un casette. Nos teníamos que hacer cargo de la realidad. Nos dieron dos semanas y en ese tiempo hubo que armar un equipo y darle rienda al plan de juego. Sería bueno armar algo más a largo plazo durante todo el año y así enfocarnos mejor en el Argentino. Hacerlo en un mes es mucho más difícil para afrontar un torneo de esta envergadura.
- El nivel del torneo
Es alto en algunos equipos. Pero es cierto que con la política de la UAR de que no puedan jugar los contratados hace que no puedan estar los mejores. Quizás retocando eso este torneo, que fue de un nivel parejísimo con cuatro equipos con chances de ser campeón, sería mucho mejor todavía.
Foto: Iván Revol